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Lo primero que se debe tener en cuenta es que ni el cargo ni la profesión de un empleado define si puede teletrabajar o no, sino las funciones que este realiza, ya que hay actividades que, por su naturaleza, requieren la presencialidad física, mientras existen algunas que no. Por ejemplo, en teoría un tecnólogo en sistemas podría optar por esta modalidad laboral, pero si el desarrollo de sus actividades requiere de un soporte permanente en la oficina, no resulta conveniente que teletrabaje.

Uno de los pasos que debe seguir una organización para implementar el teletrabajo, debe ser la identificación de actividades que son ideales para esta modalidad, destacando que las áreas técnicas, por sus características, se presentan como una gran alternativa.

El portal Interfell, en su artículo titulado "5 áreas de especialización más aptas para el Teletrabajo", resalta que no siempre se necesita ser profesional para ejecutar las funciones y que muchas tecnologías o tecnólogos pueden aplicar a diferentes cargos en esta modalidad laboral:

• Desarrollo tecnológico:

La mayoría de las carreras, técnicas u oficios que se valen de la tecnología como herramienta indispensable para la ejecución de tareas, tales como Tecnólogo en Sistemas, Arquitectura de Software, Gestión de Servidores, Administración de Bases de Datos, entre otras, son las que mayormente se prestan, dada su naturaleza, para ser practicadas a distancia.

• Diseño y creatividad:

Diseñar un logo, un branding para una empresa, una imagen corporativa, o crear campañas publicitarias, son actividades que pueden realizarse de manera remota sin ningún tipo de interrupción.
De hecho, para estas tareas, la materia prima es la creatividad, así que trabajar en un espacio que se sienta propio y adecuado según los gustos y características de la persona, hará que el trabajo fluya mejor.

Tecnólogo en diseño gráfico, tecnólogo en mercadeo y publicidad, o tecnólogo en Gestión de Industrias creativas, son algunos ejemplos que encajan perfectamente y pueden desarrollarse desde el hogar.

• Redacción y traducción de textos:

​Son muchos los especialistas en redacción o traductores que ofrecen sus servicios de manera remota, abarcando la redacción de artículos de diferentes tópicos y la traducción de libros, documentos, vídeos o páginas web.

Publicidad, Marketing digital o Generación de contenido creativo:

Hoy en día la mayoría de las empresas tienen perfiles en redes sociales y apuestan por el posicionamiento en la web, por eso un tecnólogo en comunicaciones podría cumplir con las funciones que exige el cargo desde el hogar.
Es muy común que las empresas contraten a un Community Manager para gestionar sus redes sociales y crear contenido de valor, tareas que pueden ser realizadas a distancia con total efectividad.

• Teleoperaciones o Televentas:

En la mayoría de las empresas existe uno de estos departamentos. Siendo un trabajo que se realiza por teléfono exclusivamente, no es necesario hacerlo de modo presencial.
Trabajar como Teleoperador puede ser la mejor manera de comenzar a incursionar en el teletrabajo, tomando en cuenta que sólo se necesita manejar un lenguaje fluido y tener conocimientos básicos sobre ventas y servicio al cliente.

Tecnólogo en Mercadeo y Ventas, en Gestión de Procesos, o Tecnólogo en soporte de Comunicaciones, son algunos ejemplos que encajan perfectamente con el teletrabajo.

Otros cargos de áreas contables, proyectos, talento humano, control interno, finanzas, servicio al cliente y planeación, son susceptibles de llevarse a la modalidad de Teletrabajo suplementario.

En conclusión, no hay un código que afirme cuál cargo sirve o no para teletrabajar, lo importante es tener la tecnología como el mejor aliado y saber que no importa tanto el cargo, ni la profesión, sino la actividad que se cumple. Para realizar una implementación efectiva pida una asesoría gratuita del Ministerio TIC en www.teletrabajo.gov.co.